Por segunda vez los vecinos de Cuncumén recibieron madera destinada a la combustión para cocina o calefacción. En esta ocasión se inscribieron 122 personas de las cuales solo 15 decidieron no recibir la leña, beneficiando así a otras familias que no se habían anotado en la Junta de Vecinos.
¿De dónde viene esta madera?
La donación proviene del patio de madera de Minera Los Pelambres que cuenta con resolución Nº 4411 del S. Salud del año 2010. En este patio se acopia toda la madera que se obtiene del proceso de embalajes de piezas, equipos y componentes que llegan a la bodega central. Al llegar al patio de madera, mensualmente se realiza el proceso de fumigación para el control de plagas y eliminación de posibles insectos, larvas que puedan llegar a esta última etapa del ciclo. A esto se suman los controles primarios del fabricante (restricciones del tipo de madera a utilizar), sector y control de aduana y el servicio agrícola Ganadero (SAG). No obstante a lo anterior, MLP tiene periódicamente fiscalización del SAG, en donde se realiza revisión e inspección exhaustiva de la madera y registros de fumigación.
Cristóbal Barrientos, ingeniero en Control y Monitoreo Ambiental de la Gerencia de Sustentabilidad de MLP explica: “Una de las forma de dar un buen uso a esta madera es a través de la donación a las comunidades para la calefacción. MLP no entrega madera con otro objetivo que no sea para la calefacción, es decir la quema. Para lo anterior, existe un procedimiento con el área de Asuntos públicos donde ellos centralizan las solicitudes de las comunidades, sectores o grupos de vecinos y posteriormente a la validación de la lista, se le entrega a Operaciones MLP para realizar el traslados de tolvas de madera para la calefacción en los hogares, aproximadamente 20-30 metros cúbicos por carga en cada hogar. No existe cobro de MLP por ir a dejar madera para la calefacción al hogar ni por la inscripción en las listas”.
“Nos sirve harto la leña para el frío y para cocinar. Aquí hago pan y brasas para tomar mate. Estoy muy agradecida, porque sin esto tendríamos que buscarla por otro lado”, dice Ester Mondaca, vecina de Cuncumén.
PUBLICADO EN EL BOLETÍN DE AGOSTO 2017
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